Ser el sereno del grupo es una responsabilidad muy grande, y una experiencia irrepetible (x mis cojones q será irrepetible).
Te vas a una cena, y sin comerlo ni beberlo (sobretodo ni beberlo), entras al restaurante como comensal y sales licenciada en ciencias de la salud (con lo fácil que es, y lo que se forra la USC...). Yo ejercí de enfermera y psicóloga, sin ir más lejos.
Me explico. Lo primero, es fácilmente deducible. El alcohol crea en nosotros un no se qué, que qué sé yo, que te hace perder el sentido del equilibrio, te produce bienestar de cuello para arriba, pero el estómago se resiente. Creo que no es necesario explicar más. En este terreno, hice mis prácticas de "enfermería".
Lo de psicóloga...también es fácilmente deducible. El alcohol crea en nosotros un no sé qué, que....vaaale, valeee, dejo el "copia-pega". Pues que crea dos posibles reacciones que necesitan de asistencia psicológica: la exaltación del amor, la amistad, el "eres para mi...", el "cuanto te quiero", y ese tipo de cosas. Hasta aquí bien, a nadie le amarga un dulce, y de vez en cuando te hace falta escuchar estas pasteladas. La otra posible reacción es la de "ese es un hijo de p..." y lo peor, lo que sigue a esta frase "voullo ir dicir". Igual igual, de borrachera no es el mejor momento para exaltar la sinceridad...En ocasiones, los daños verbales pueden acabar necesitando de betadine, agua oxigenada y demás familia, con lo cuál volvemos a necesitar de los conocimientos de enfermería. Desde aquí, hago un llamamiento a la USC (cuanta publicidad le hago hoy): el ofertón de psicoenfermería, la carrera del futuro.
A pesar de todo esto, dicen que de todo se aprende, y yo lo he hecho. Siendo el chico/a "o,O alcohol" lo puedes pasar bien (nadie te lo prohibe).
Te lo pasas mejor al día siguiente... cuando sabes cosas que los demás quieren y no deben conocer...
ResponderEliminarLa información es más valiosa que el dinero.